¿Cómo creo que se aprende mejor?
Buena pregunta ésta, como todas las demás. Quisiera poder hacer mi trabajo lo mejor posible independientemente del lugar en el que trabaje. En estos momentos estoy dando clases a niveles iniciales, en educación infantil, pero me encantaría poder ampliar mi experiencia dando clase en otros niveles porque creo que me ayudaría a tener un concepto más amplio de la enseñanza/aprendizaje. Hasta la fecha he tenido pocas oportunidades de dar clases a niños más mayores, quitando la experiencia de la escuela hogar, donde tuve a niños de todas las edades.
Creo que se aprende mejor siendo un tipo de profesora que no se olvida de tener en cuenta al alumno, que mantiene la inquietud por seguir aprendiendo y mejorando, que busca siempre la mejor forma de llegar a sus alumnos consiguiendo un buen ambiente de trabajo para el grupo de clase. En definitiva, siendo una persona-profesora que está ahí siempre para ayudar y guiar al alumno en su aprendizaje, que fomente el aprendizaje autónomo y divertido de sus alumnos.
¿Qué valores considero fundamentales?
Seguro que con todo lo que he dicho en los puntos anteriores ha quedado más o menos claro. Y es que para mí los valores fundamentales de una persona, sea profesor o no, y máxime si lo es, son los siguientes:
- Saber escucharse a una misma y a los demás
- Tener amplitud de miras, curiosidad intelectual y disposición para seguir aprendiendo
- Amor a la verdad
- Respeto por la libertad de cada persona, sea niño o adulto
- Autoridad y respetabilidad
- Autoestima, alquien que no se quiere a sí misma, ni se interesa por su bien estar no puede hacerlo por los demás
- Optimismo y buen humor ante los problemas y dificultades. De todo se sale. Yo a mis alumnos les enseño esta canción desde bien pequeños inventada por mí
Con la "A" Alegría, con la "E" Entusiamo, con la "I" Ilusión, con la "O" Optimismo con la "U" ..... ¡¡¡ Hurra mi clase que bonita es !!!
- Autocontrol, paciencia y fortaleza. Las pongo juntas porque para mí sin esto en la vida vas sin control. El ser paciente y esperar el cambio y el momento de cada persona es fundamental. La fortaleza de espíritu se educa y se transmite.